Diario de una Esposa Traicionada por Rocio H. Gómez
Capítulo 327

Capitulo 327 

Lo siento. 

Él se quedo perplejo por un momento, como si de repente volviera en si “Perdón, solo quiero empezar de nuevo contigo.” 

“¿Por qué deberia?” 

Lo mire friamente y agrequé: “Isaac, pregúntate a ti mismo, ¿por qué quieres empezar de nuevo conmigo en realidad?“2 

Antes, con solo decir una palabra, yo le creia sinceramente. Solo para terminar con la cabeza rota y el cuerpo lleno de heridas. En aquel momento que por fin me habia despertado de ese sueño, no estaba dispuesta a cometer el mismo error de nuevo 

Él frunció ligeramente los labios y me dijo: “Porque…” 

Lo interrumpi con indiferencia, curvando mis labios con ironia y diciéndole: “Porque estás acostumbrado a ganar, solo te molesta no poder tener algo. Esas historias sobre darse cuenta del amor verdadero después de la separación, nunca les crei 

No es eso. 

Isaac negó con firmeza, sus ojos oscuros como obsidianas parecian querer absorberme y comenzó a explicarme: “No puedo vivir sin ti. Cloé, estoy acostumbrado a tener tu presencia en casa, acostumbrado a escucharte llamándome de repente, acostumbrado a esperarte hasta tarde para volver a 

casa…. 

Todo se reducia a la costumbre, solo eso. Como perder una muñeca que habías tenido junto a tu almohada durante años, y luego experimentar un sindrome de abstinencia. 

Respiré hondo, tratando de calmar mi ira, y le dije con palabras punzantes: “¿Así que solo por tu incomodidad, debería empezar de nuevo contigo? Isaac, jestoy harta! En cuanto a lo que dijiste sobre la señora Montes, puede que alguna vez fuera interesante, pero ahora que estás en bancarrota, ¿qué ganaria yo con eso?  sᴇaʀᴄh thᴇ Findɴovel.ɴet website on Gøøglᴇ to access chapters of novels early and in the highest quality.

Él frunció el ceño ligeramente y me pregunto: “¿Dices que yo estoy en la bancarrota??! 

Riéndome fríamente, sin escatimar esfuerzos para herirlo profundamente Todos te han abandonado, ¿crees que soy un vertedero que siempre estará esperando por ti? 

se tiñeron de rojo, su tono era irónico y paranoico: “Entonces, 

Sus pestañas temblaron, y al mirarme de nuevo, sus ojos se enfriaron aunque sus párpados se tiner ¿si algún dia vuelvo a ser el admirado presidente Montes, considerarias estar conmigo? 

Tal vez!” Lance esas palabras sin pensar. 

Con el imperio a punto de caer, no era tan simple decir que volvería a sus dias de gloria. De cualquier manera, lo único que quería era cortar por lo sano S Isaac guardó silencio por un momento, pero de repente sonrió, levantó la mano y acarició mi mejilla de manera casi enfermiza diciéndome: “Cloé, recuerda tu respuesta 

Luego, retiró su mano de manera decidida y se marchó con pasos firmes. Con el sonido del ascensor llegando, tanto el vestibulo como el espacio entre este y el ascensor volvieron a la tranquilidad. Como si todo lo que acaba de pasar, hubiera sido solo un sueño. Me apoyé en la puerta, tratando de calmar mi respiración, arreglando mi ropa que él había desordenado… 

Pero mientras lo hacía, senti que algo no estaba bien y, de manera instintiva, miré hacia el otro extremo del ascensor. Camilo estaba apoyado en el marco de la puerta, con los brazos cruzados, como si acabara de disfrutar de una gran obra. Cuando nuestras miradas se encontraron, no mostró signos de sentirse avergonzado por espiar, incluso se mostró intrigado 

“Parece que tu rodilla ya está mejor. Cuando lo pateaste, fue bastante fuerte” 

Cerré los ojos momentáneamente, mirándolo con irritación y diciéndole: “Camilo, ¿qué te pasaría si un dia no espías a los demás?“! 

“Estoy en la puerta de mi propia casa.” 

Respondió con calma, voltando la situación: “Ustedes son los que no cuidan su privacidad.” 

Un montón de excusas sin sentido. No tenia ganas de discutir con él, y justo cuando iba a cerrar la puerta, él habló de nuevo: “Tengo una manera de hacer que ustedes dos corten de una vez por todas. 

Me detuve y le pregunté: “Qué manera?” 

La última frase de Isaac antes de irse me dejó algo inquieta. Como si aún pudiera pasar algo más. 

Él sonrió con malicia, pero su tono era serio mientras me decía: “Estar conmigo.“% 

Sᴇarch the FindNovel.net website on G𝘰𝘰gle to access chapters of novels early and in the highest quality.