¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia
Capítulo 1768

Capitulo 1768

Jimena escuchaba con un semblante tenso, sin decir una palabra, apretando fuertemente la mano que tenfa sobre la mesa. Orson se gir6 para mirarla y vio como Jimena contenia con dificultad su tormento interior.

Con ansiedad y enfado, le dijo a Priscila: “jDeja de mentir! Eres capaz de cualquier cosa con tal de casarte conmigo.”

Conociendo a Priscila como la conocia Orson, si ella hubiera estado embarazada de su hijo, se lo habria hecho saber de Inmediato, incluso se habria asegurado de que todo el mundo lo supiera. Utilizar al nifio como chantaje era el método més rapido para forzar el matrimonio.

;Coémo podria ella desperdiciar esa oportunidad por una razén tan absurda y marcharse sola al extranjero para tener al nifio y luego volver con él después de tanto tiempo?

Priscila estaba herida, mirando a Orson con incredulidad: “;Asi piensas de mi?”

Las lagrimas empezaron a llenar sus ojos mientras le decia a Orson con dolor: “;Qué clase de persona soy a tus ojos?”

"Sabes muy bien como eres”, respondié Orson con frialdad.

Durante esos tres anos, Priscila habia mostrado su arrogancia y altivez, la insolencia y toxicidad de una heredera mimada quedaron al descubierto ante él.g2

Orson habia visto su verdadero rostro desagradable.

Y porque habia visto su verdadero rostro, no iba a creer tan facilmente en sus palabras.

Decir que habia ocultado la existencia del nifio solo para que él se enamorara de ella y se casara con ella voluntariamente.... Orson jamds creeria una excusa tan pobre.

Al ver la firmeza en la actitud de Orson, Priscila rompi¢ a llorar y dijo sollozando: “Todo lo que digo es verdad. Ni siquiera le dije a tu madré que tenia un hijo tuyo. No se lo dije justamente para que ti te enamoraras de mi y te casaras conmigo por voluntad propia. Sino me crees, podemos hacer una prueba de paternidad...”

Dicho esto, Priscila apret6 mas fuerte al nifio en sus brazos.

El nifio, sintiendo la tension y el dolor de su madre, hablé con una voz tierna: “Mama, no llores...” Mientras hablaba, levanté su manita para secarle las lagrimas a Priscila,

Al oir al nifio llamarla “mama’, el corazén de Jimena se estremecio violentamente, y su vulnerabilidad interior fue tocada. Ella también tenia un hijo y sabia cémo se veia y sonaba un nifio que realmente se preocupaba por su madre.

La voz de Jason era suave y timida, reconfortando a Priscila, incluso extendiendo su mano para secarle las lagrimas. No era acaso el dolor y la impotencia de un nifio al ver a su madre humillada? Viendo esto, Jimena ya no podia quedarse sentada. Se levanté y con una expresion fria dijo: "Continuen ustedes, me voy.”

Y sin mas, Jimena se dio la vuelta y se marché

Orson se levanté para seguirla: “Jimena...”

Intenté tomar su mano, pero Jimena la apart6 rapidamente. Se volted con una mirada herida y fria, y le dijo a Orson: “Arregla tus propios asuntos, jme voy!”

Dicho esto, se marché sin mirar atras.

Viendo que Jimena estaba realmente enfadada, Orson se sintié algo desesperado y estaba a punto de ir tras ella cuando Priscila, sosteniendo al nifio, se levanté apresuradamente y dijo: “Orson, vamos al hospital a hacer la prueba.”

Las palabras de Priscila detuvieron a Orson en seco. El se volted y le lanzé una mirada furiosa a Priscila, luego mir6 al nifio que ella sostenia en sus brazos.

Ese nin

en efecto, tenia un par de ojos tan hermosos como los suyos. Un par de ojos inocentes lo miraban con timidez, y a pesar de su aspecto lastimoso, era imposible no sentir compasion.

;Podrfa ser este nifio su hijo?

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