¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia
Capítulo 1795

Capitulo 1795

Asier dijo: “Detengan el concurso e investiguen, que una investigacion lo revelaréa todo!”

Aster estaba a su lado cuando Elia estaba dibujando sus disefios. El habia visto todos sus disefios y también habla participado en ellos.

;Coémo podria no saber si las obras de Elia eran originales?

Apenas Asier terminé de hablar, y antes de que Lopez pudiera responder el ptiblico abajo se altero y comenzaron a protestar de pie: “Que se vaya el nimero tres, plagiador, fuera del escenario!” Incluso hubo quien lanzo objetos al escenario.

Liuva, que orginalmente desfilata con confianza y gracia, fue golpeada de repente, solté un grito de miedo y rapidamente corrié hacia el backstage para protegerse.

Pero eso no sirvié de nada, pues el publico descubrié que los disefios del participante numero dos y del nimero tres eran idénticos, lo que provocé una indignacién

masiva

Especialmente los estudiantes universitarios que habian venido con la intencién de aprender, estaban furiosos y gritaban

“Que el participante nimero tres aparezca y admita su error!"g2 Sᴇaʀᴄh thᴇ Find ɴøᴠel.nᴇt website on Gøøglᴇ to access chapters of novels early and in the highest quality.

"Si, que pida disculpas publicamente y se vaya del mundo del disefio de joyas

“Pedir disculpas publicamente y salir del mundo del disefio de joyas!” Ese grito se convirtié en el lema de todos, que lo coreaban al unisono.

La situacion se volvié incontrolable y reinaba el caos y el ruido,

Elia, que estaba furiosa, se sinti6 aterrorizada al escuchar los gritos del publico. A pesar de ser la victima en este incidente, la multitud la atacaba sin entender la situacion

Antes, Elia estaba simplemente enojada, pero ahora sentia tanto rabia como injusticia, y sobre todo una sensacion de impotencia.

Al ver esto, el presentador del evento tomé el micréfono para calmar al publico: “Por favor, calma, no sabemos que ha pasado aqui, detendremos el concurso e investigaremos para darles una respuesta satisfactoria. ;Podrfan tranquilizarse un momento?”

Cuando el presentador anuncié la pausa en el concurso y el inicio de la investigacién, Lopez parecié darse cuenta de la gravedad de la situacion y le dijo a Asier con una sonrisa nerviosa: “Sr. Griera, tenga la seguridad de que detendremos el concurso e investigaremos para darle a la victima una respuesta justa.”

Asier sabia que sus palabras eran simplemente diplomaticas, en otros tiempos, habria echado a Lopez con una patada. Tal escoria no merecia estar frente a é Pero ahora, incluso shquisiera hacerlo, no podria. Sentado en su silla de ruedas, ya se sentia disminuido en altura, y con sus piemas inmovilizadas, no podia siquiera patear a alguien,

La mirada fria de Asier barrida Lopez, gir6 su silla de ruedas y se dirigié a Elia. Tomé su mano y la hizo sentarse a su lado.

Ella volvié en si y se encontro con la mirada profunda de Asier.

Esa mirada, tranquila y profunda, transmitia calidez y una especie de poder calmante.

Ella entendid lo que Asier queria decir y apreté su mano con firmeza. La palma de su mano estaba seca y célida, transmitiendo tranquilidad a su corazén agitado. Se sentd

El pulgar de Asier acaricié su

suavemente el dorso de la mano de Ella, un gesto aparentemente comun, pero reconfortante.

Elia le ofreci6 una sonrisa tenue, indicando que estaba bien y que no debia preocuparse.

Viendo que Elia estaba a salvo por el momento, Asier sacé su teléfono y llamo a Bruno “Trae refuerzos, ha surgido un problema.”

Capo 1790

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