¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia
Capítulo 500

Capitulo 500

Al escuchar a Rayan deci: que alguien le ha vendido el colgante.

Elia aspira un soplo de aire fro, su respiracion’se detuvo, su corazén empezo a latir como si alguien estuviera golpeando constantemente una puerta de madera con un martillo; “Bum, bum, bum*, tanto vibrante como opresivo.

Este colgante de esmeralda fue un regalo de Asier para ella.

Era una joya que le habia dado antes, que ella habia perdido durante cinco afios. Luego, Asier recuper6 este colgante de esmeralda de Vania.

No lo guardé para él, sino que le volvié a dar

Durante todo este tiempo, ella habia mantenido el colgante de esmeralda en su casa.

Después de mudarse, puso el colgante de esmeralda en el cajon de su armario.

;Coémo es que alguien lo habia vendido?

Elia estaba nerviosa y desconcertada.g2

Miré a Rayan y luego a Asier, viendo que él estaba envuelto en una aura oscura y gélida, su rostro atractivo era como un paisaje helado, pero con un aire frio y tenebroso.

“Quién te lo vendi6?” la voz de Asier son6 como un estilete de hielo.

Opresivo, su mirada era aguda, pero se estaba mirando hacia Elia.

Esa mirada, hacia que el corazon de Elia casi se detenga, era realmente aterradora.

Retuvo la respiracion, mirando a Rayan expectante, esperando que sea solo una réplica idéntica, y no la que tenfa en su poder.

Rayan sac su teléfono, abrié una foto y se la mostré a Asier para que pudiera verla: “Esta mujer. Acaba de venir a nuestra tienda para vendernos el colgante, le di tres millones”.

Alver a Asier mirar la pantalla del teléfono, su rostro atractivo se volvié terriblemente frio, sus ojos también estaban llenos de llamas, su rabia estaba ardiendo.

Su corazon se encogi6 de miedo, también miré hacia el teléfono que Rayan sostenia en lo alto

De un vistazo, vio la pantalla del teléfono, ila foto era de su madre, Rosalinda!

Fue su madre, Rosalinda, quien vendi6 el colgante de esmeralda que Asier le habia regalado, jpor tres millones!

Asier también conocfa a su madre, porque la Gltima vez que su madre fue acosada por Gabriel, fue Asier quien la ayudo.

Su madre vendi6 el colgante de esmeralda que Asier le habfa dado, perp Asier podia creer que fue ella misma la que tomara la decision de venderlo.

La respiracion de Elia se detuvo, su corazén también se detuvo.

Estaba tan asustada que todo su cuerpo se paralizé, sus ojos se abrieron de par en par, su cuerpo era como el de una marioneta, inmévil.

Asier le arrebat6 el colgante de esmeralda de las manos de Rayan, sacé su téléfono y llamé a Bruno: “Transfiere treinta millones a Rayan”.

Después de colgar el teléfono, le dirigié una mirada fugaz a Rayan: Tengo algunos asuntos personales que atender, te invitaré a cenar otro dia”

Rayan mir6 a Asier, luego a Elia, comprendiendo que sus asuntos personales eran urgentes.

Con una sonrisa en su boca, dijo: “Me voy".

Luego, se dio la vuelta y sali6 de la oficina:

Pago tres millones, a cambio de treinta millones, jeste trato era demasiado rentable!

Elia volvié en si, jdeseando irse con Rayan! Pero bajo la presion e intimidacion de Asier, no podia moverse ni un paso.

Ella estaba a punto de disipar la rabia de Asier, pero Rayan volvi6 a despertar su rabia,

Asier la mir6 con una mirada fria y afilada, y se acercé a ella: “;Hay algo mas que quieras decir? Su peligrosa aura helada se acercaba, Elia se esforzaba por mover sus pesados pasos, retrocediendo, tratando de alejarse de él, sus ojos claros estaban llenos de miedo: “Yo, yo......"

Se habia quedado sin palabras. Sᴇaʀ*ᴄh the FɪndNøvel.ɴet website on Gøøglᴇ to access chapters of novels early and in the highest quality.

Porque no comprendfa qué esta pasando.

¢Por qué su madre de repente vendié su colgante de esmeralda?

“No sabes cémo justificarte, ;verdad?” La voz arrastrada de Asier, rebosaba de un peligro inminente.

Elia retrocedio hasta que su pie golped la mesa de café, su cuerpo se incliné hacia atras.

El brazo fuerte y musculoso de Asier se extendié sobre su cintura, la agarré y la jalé hacia él, su cintura casi se rompio.

Asier con una cara tan oscura como una tormenta le reprendié: “Me has decepcionado mucho! ;Sabes cudl sera tu castigo?” “Asier, eh...” Elia estaba a punto de decir algo, pero no sabia qué decir.

Su cintura fue agarrada con fuerza, como si su delicado cuerpo pudiera quebrarse con solo un poco mas de presion,

Elia sinti6 dolor y miedo, y traté de empujarlo.

El agarré su mano y la empujé contra la mesa de café. Su fuerza absoluta y control no le dejaron ni un apice de posibilidad para resistirse.

Era como una bestia enfurecida, desgarrandola con su boca, era salvaje y aterrador.

Cuando Elia desperto, ya era de noche.

Estaba acostada en la habitacion principal de la Villa Serenidad.

A

su lado, Asier ya no estaba.

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