Capítulo50
La foto se encontró en web oficial del tribunal, y fue de hace tres años. En la imagen, Javier viste un túnico de abogado y se para con actitud majestuosa en la corte mientras defiende
apasionadamente.
Este App fue desarrollado por Alejandro, y solo necesitaba una foto clara de una cara para buscar información relevante sobre esa persona. En un máximo de tres a cinco minutos, podía encontrar información relevante de todas las fotos cargadas en todo el mundo, lo que era mucho más preciso que buscar en línea. Sin embargo, le llevó diez minutos buscar información sobre Javier Pérez, lo que indicaba que no era una figura pública que aparecía con frecuencia en público. Además, no tenia el hábito de tomar fotos o tener cuentas de redes sociales. ¿Por qué era tan misterioso si solo era un fiscal común? Javier Pérez… Después de reflexionar por un momento, Alejandro de repente tuvo una idea, dijo con sorpresa: -¿Podría ser…?
-¡Muy bien, qué bien! – Alejandro frunció el ceño con una expresión oscura y melancólica, y tuvo dificultades para respirar. -¡Irene Isabel, te metes en problemas con cualquier hombre, no te importa quien sea, me dejaste y rápidamente te involucraste con Diego, y ahora estás enredada con otro joven de la familia Pérez. ¿Quién te crees que eres?
En ese momento, se escuchó el rugido de un coche deportivo desde atrás. Alejandro volvió en sí y miró hacia afuera por la ventana. Un coche deportivo negro pasó velozmente como un torbellino en la oscuridad. ¡Era el coche de Irene! ¿Cómo es que ella apareció repentinamente aquí? ¡La situación no podía ser tan simple! El corazón de Alejandro ardía de furia y golpeó el cristal del coche con el puño. ¡César, síguela!
La entrada del hotel estaba bloqueada por los periodistas y los investigadores tuvieron que hacer un gran esfuerzo para subir al sucio Santiago al coche. La conferencia había terminado en un caos. Javier no siguió el coche, sino que fue a la puerta trasera y esperó pacientemente la aparición de
su hermana.
Unos minutos después, el coche negro llegó como estaba previsto y se detuvo frente a Javier.
Aarón bajó la ventana del coche y saludó con cortesía y respeto:
Buenas tardes, Señor Pérez.
-¡Qué tal, Aarón!-Javier se inclinó para mirar a Clara que estaba sentada perezosamente en el asiento del copiloto, y le sonrió con una expresión de cariño, extendiendo la mano para pellizcar
las suaves mejillas de su hermana.
-Parece que Aarón te ha estado cuidando bastante bien últimamente, tienes un poco más de carne
en la cara.
-¡No he engordado! – Clara hizo un puchero con los labios.
-Claramente has engordado, estás más linda con tus mejillas regordetas.-.La escena de coqueteo fue presenciada por Alejandro, que estaba escondido en la oscuridad. El corazón de Alejandro latía
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retrovisor, temblando como una codorniz. Pero en su opinión, pensó que era normal que la Señora Isabel fuera perseguida por los hombres, ya que era tan
qué le pasaba, siendo tan frio con la Señora.
lente y
hermosa. Solo su jefe no sabía
-¿Fue genial mi actuación hoy? -Javier levantó las cejas con una expresión de orgullo mientras hablaba con su hermana.
-Fue impresionante, has ganado muchos fans. Muchas chicas te están buscando en línea, ya eres un tema popular. – Clara se apoyó en la ventana con los brazos cruzados y miró a Javier, Irradiaba un aire juvenil por todo el cuerpo. Alejandro los observaba fijamente, con un leve movimiento en su corazón. De alguna manera, quería estar en el lugar de Javier en este momento, quería mirarla de la misma manera. Quería ver la sonrisa desenfrenada en sus ojos, porque ella nunca se había
reido así con él antes.
-Jajaja, és tan cursi. Realmente no eres adecuado para el papel de un hombre romántico,
hermano. El papel de un tonto es más adecuado para ti. -los dos hermanos bromeaban entre sí antes de volver al tema principal. –
-Pero hermano, necesitaremos tu ayuda en el futuro. Clara frunció el ceño. -No dejes que ese bastardo que nos ha manchado con barro salga fácilmente.
-No te preocupes, estaré seguro. Al menos tres años. ¡No le daré ninguna oportunidad de reducir su condena e incluso menos permitiré que alguien lo saque de prisión! -Javier asintió con aprobación hacia su hermana.
-Pero todo esto se debe a tu plan perfecto. Eres tan buena para hacer predicciones, Santiago ha caído en cada trampa que has puesto para él. Si todos los delincuentes fueran tan predecibles, los oficiales de justicia tendrían mucho menos trabajo.
Es cierto, Santiago Sánchez realmente era un tonto. Pero la razón por la cual KS pudo demandar con éxito a Santiago fue porque José finalmente se presentó como testigo y reveló las actividades de Santiago durante los últimos dos años en los que se aprovechó de él para obtener ganancias
ilícitas en el hotel.
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